Butifarras
La butifarra es, junto al fuet, es el embutido favorito en Cataluña. Nosotros elaboramos con mimo todo tipo de butifarras desde 1870: ¡hace más de 150 años! O siglo y medio, que se dice rápido. En esta empresa familiar mantenemos las recetas de butifarra y el savoir faire de nuestros antepasados. Ello se nota en el resultado: butifarras de distintos sabores y formas con una textura agradable y un sabor que te hace pensar “qué buena está esta butifarra”. Prueba nuestras butifarras tradicionales o aquellas con sabores desconocidos e incluso formatos novedosos ideales para la creatividad culinaria.
La butifarra: información y curiosidades
¿Qué es la butifarra?
En pocas palabras, una butifarra es, como cualquier otro tipo de salchicha, carne de cerdo embutida en tripa natural del mismo animal para que dure más y se pueda consumar más tarde.
La gracia de la butifarra es que tiene su origen en Cataluña, donde es consumida de forma habitual. Se diferencia por su composición y su calibre.
Hay butifarras frescas (que deben cocinarse al estar crudas) y butifarras cocidas (que pueden comerse a lonchas).
¿Qué tipos de butifarras existen?
Hay un montón de butifarras diferentes. Principalmente por su variedad de sabor pero también de forma. Veamos un listado con las principales variedades de butifarras:
- Butifarra cruda: es la más popular pues forma parte de muchas recetas tradicionales de la cocina catalana.
- Butifarra negra: con sangre, resulta un imán irresistible para aquellos que la aprecian.
- Butifarra blanca: es muy agradable de comer por su sabor suave. La receta del tatarabuelo Esteban no falla, incluso gana premios.
- Butifarra de huevo: tradicionalmente se elabora solamente para el Jueves Lardero (o Dijous Gras en catalán) en febrero, pero la nuestra tiene tanto éxito que está disponible durante todo el año.
- Butifarra de Perol: crujiente por el mezclado de carnes y de sabor intenso por la pimienta negra.
- Butifarra catalana: todas las butifarras son catalanas pero ésta se ha quedado con el nombre de la catalana. Es tierna y de sabor suave. Ideal para ensaladas y para los niños. Nosotros le añadimos un poco de trufa. Brutal.
Existen aún más tipos de butifarras, como habrás podido ver en las fichas de producto de arriba. Por ejemplo, la butifarra de huevo con patata y cebolla para una tortilla española. O la Tirallonga es perfecta para una barbacoa.