Codillo de cerdo asado con patatas. Menudo plato. Contundente a la par que sabroso, como no podía ser de otra forma por su origen germánico. Eso sí, como curiosidad, en Alemania el codillo al horno suele acompañarse de puré de guisantes o de chucrut, en función de en qué región nos situemos.
Como decíamos, el codillo al horno es muy jugoso, en parte gracias al hecho de que el codillo de cerdo lleva hueso. Bueno, y siempre está bien probar de comerlo con la piel del codillo pues el efecto crocante es interesante. Pero es que el resultado final es además muy aromático, por las distintas hierbas usadas.
A continuación te mostramos cómo preparar el codillo al horno en una hora. Lo hacemos de la mano del chef Aleix Moradell del restaurante Cal Ferrer en Campany (Alt Empordà). Como curiosidad, en las fotos verás un horno peculiar pues en el restaurante tienen lo que se conoce como un horno a la brasa que funciona con carbón.
Ingredientes para el codillo de cerdo al horno
El siguiente listado de ingredientes está pensado para 2 personas o raciones.
- 2 codillos de cerdo asados (los nuestros están de rechupete).
- 1 patata grande o 2 patatas medianas. La variante mona lisa es perfecta.
- 1 cebolla grande o 2 cebollas medianas.
- Zanahorias baby o pequeñas. La cantidad es al gusto pues las usamos para la guarnición.
- 1 manzana golden o similar.
- Perejil.
- Romero.
- Laurel.
- Sal.
- Aceite de oliva.
Cómo hacer codillo al horno con patatas
El tiempo de preparación del codillo al horno asado con patatas es de una hora.
1) Cortamos la cebolla en juliana. Luego pelamos la manzana y la cortamos a trozos grandes, sacando el corazón. Rehogamos todo a la vez en una sartén o en una cazuela con un poco de aceite, una pizca de sal y las hierbas aromáticas.
2) Antes de abrir el envase de los codillos, tenemos que desglasar el caldo o la grasita. Para ello metemos los codillos en el microondas a temperatura media hasta que la gelatina que los rodea se vuelve líquida. Los abrimos, con cuidado de no quemarnos, volcándolos en un colador apoyado en un bol. Dejamos que se escurran bien y reservamos el caldo.
Consejo del chef: “Este paso de sacar bien el codillo de cerdo de su envase puede parecer una tontería pero es importante hacerlo bien.”
3) Retiramos y reservamos la manzana para que no quede muy hecha. Vigilamos que la cebolla no se queme.
4) Mientras la cebolla se acaba de hacer, lavamos, pelamos y cortamos a dados las patatas para añadirlas a la misma cazuela o sartén en la que estamos sofriendo la cebolla.
Consejo del chef: “Lavar las patatas antes de pelarlas, y no después, para no perder almidón.”
5) Pelamos y añadimos las zanahorias para rehogarlas unos minutos junto a la patata y la cebolla.
Consejo del chef: “Si hemos comprado zanahorias precocidas, las incorporamos al final junto a la manzana.”
6) Incorporamos el caldo del codillo que previamente hemos reservado. Dejamos a fuego medio hasta que la patata esté cocida pero entera.
Consejo del chef: “Si prefieres un plato caldosito, tapa la sartén para evitar que evapore mucho durante la cocción.”
7) Añadimos el codillo de cerdo. Solamente son necesarios unos pocos minutos pues ya están hechos.
8) Colocamos todo en una bandeja de horno y la metemos a alta temperatura unos minutos para darle al codillo ese punto tostado, dorado y jugoso. ¡Es la gracia del codillo al horno! El momento ideal de sacar el codillo es cuando se deshace con el tenedor.
9) Poco antes de sacar el codillo asado del horno colocamos la manzana en la bandeja. Así la calentamos evitando que se rompa, para que esté entera al emplatar.
4 consejos finales para aprovechar el codillo asado
En primer lugar, antes de emplatar, te recomendamos dejar reposar el codillo al horno unos cinco minutos. Y ya para emplatar, sirve el codillo, las patatas y el resto de acompañamiento, un poco seco, con solo un poco de jugo. Pon el resto de la salsa (el caldo de la cocción) en una salsera y de esta forma, cada comensal podrá decidir qué cantidad prefiere.
Por otro lado, si te estás preguntando cuál es el mejor maridaje para el codillo de cerdo al horno, la elección es fácil: cerveza suave o vino tinto.
Y finalmente, si resulta que te sobra, puedes guardar el codillo asado en la nevera pues conservará el sabor un par o tres de días sin ningún problema.